La diabetes afecta a todo el organismo, pero en particular a los riñones, el corazón, los ojos, los nervios y los vasos sanguíneos. Esta enfermedad puede provocar problemas en estos órganos, como la hipertensión, la enfermedad renal, la enfermedad coronaria, la ceguera y el daño nervioso. Por eso es importante controlar la diabetes para evitar estas complicaciones.
Las complicaciones de la diabetes son numerosas y variadas. Entre las más comunes se encuentran la hipertensión, la enfermedad renal, la enfermedad coronaria, la ceguera y el daño nervioso.